La boda tuvo lugar en distintas ubicaciones de la misma aldea. Así, la ceremonía se llevó a cabo en las ruinas de la Iglesia, el cóctel discurrió por las callejuelas de la aldea y la comida y el baile en una finca con vistas a los Cameros Viejos. Las hortensias de colores fueron las flores escogidas para darle color al evento, y las balas de paja se erigieron como elemento fundamental de la decoración. Intentamos que todos los elementos se integraran en un entorno único.