En plena Sierra de la Demanda, tuvimos la oportunidad de organizar una boda de marcado carácter internacional. Con la naturaleza y el entorno como referencia, todos los elementos que formaron parte del evento parecían haberse sacado de allí mismo.
Cuadros Vichy en rojo y blanco para decorar tanto el chill out como el banquete, y tiestos con plantas aromáticas fueron la seña de identidad de una boda muy divertida tanto para los novios como para los invitados que asistieron desde varios países.